Nuestra
historia
Heredamos la pasión por los guantes de nuestros abuelos, unos valores y un sueño que hoy queremos mantener.
Nuestra
Los Inicios
Desde muy joven nuestro abuelo Rafael comenzó a trabajar como aprendiz guantero, descubriendo poco a poco que el mundo del guante le apasionaba. Estirar la piel con sus manos. Rasparla para que quedara fina. Cortarla a tijera. Diseñar patrones capaces de ajustarse a cada mano, como si de una segunda piel se tratara. Fabricar elegancia y confort al mismo tiempo.
Amalia, nuestra abuela, también compartía su pasión por el mundo del guante. De joven había trabajado en la venta de guantes de los grandes almacenes franceses Galeries Lafayette y, a su vuelta a Madrid, en la prestigiosa tienda de Guantes Felisa Ramírez.
Año 1933
Rafael y Amalia abrieron su propia tienda en la calle Recoletos de Madrid.
La historia de este gran sueño se escribía a base de esfuerzo, pasión y cariño. Rafael, junto a su equipo de oficiales guanteros y costureras, elaboraba guantes de alta calidad, seleccionando las mejores pieles y realizando un minucioso trabajo manual.
Amalia, aportaba cercanía en la tienda e innovación en el taller al trasladar las necesidades de los clientes. Su capacidad de superación y la calidad de sus piezas, convirtieron sus guantes en un referente nacional e internacional, llegando a vestir las manos de las personalidades más importantes del momento.
La Herencia
Los años pasaban, nuestros abuelos junto a nuestros padres trabajaban en el negocio familiar, mientras nosotros jugueteábamos con recortes y retazos de pieles. Nuestro abuelo compartía con nosotros todos los detalles de la técnica, explicándonos que cada paso en la elaboración de un guante está perfectamente planeado, desde la elección de la piel hasta la última puntada. Nuestra abuela nos contaba interesantes historias y la importancia de escuchar a los clientes.
A principios de este siglo, y tras más de 60 años de trabajo, la tienda de Recoletos tuvo que poner fin a su actividad. Pero toda la experiencia de nuestra familia en el sector del guante, maduraría para volver años más tarde preparada para los nuevos tiempos.
Amalia de Luna
En 2016, bajo el nombre de nuestra abuela Amalia de Luna, retomamos el proyecto familiar para adaptarnos a la demanda del hombre y la mujer actual. Amalia de Luna nace como una nueva firma, especializada en guantes, que hila a la perfección tradición y actualidad. Guantes fabricados artesanalmente, conservando los valores, el proceso de trabajo tradicional y la calidad.
Elaboramos una gran variedad de modelos, tallas y colores, a partir de una selección de las mejores pieles para su venta exclusiva a través de Internet. Mantenemos la esencia del negocio, escuchamos a nuestros clientes para que puedan encontrar el guante que necesitan y si no lo tenemos disponible en ese momento, estudiamos la posibilidad de hacerlo por encargo.
Un proyecto de familia que perdura gracias al esfuerzo, pasión y cariño que nuestros abuelos supieron transmitirnos, y que hoy continuamos con las mismas ganas e ilusión que un día ellos comenzaron.
"Tus manos cuentan historias, tus guantes también"
- AMALIA DE LUNA -